Desde IU Tarancón se valora positivamente el hecho de que las dos mociones antinucleares hayan salido adelante.
Abandonar la energía nuclear es sobre todo una cuestión de voluntad política, no hay insalvables problemas técnicos, energéticos o económicos que lo impidan. Es lo deseable desde la óptica tanto ciudadana como medioambiental. Los argumentos a favor de dicha energía que vienen surgiendo en los últimos años provienen de personas afines al sector y por lo tanto carentes de valor objetivo. Países como Finlandia que se ponen como ejemplo del renacer nuclear ya han manifestado su error al poner nuevas centrales nucleares en funcionamiento puesto que el coste económico es enorme y la eficiencia de esas nuevas centrales nucleares todavía esta por probar. Alemania por el contrario, ha marcado una hoja de ruta para acabar con todas las centrales nucleares en su territorio basándose en el fomento de las energías renovables y la eficiencia energética. Desde la puesta en marcha de este plan (con la entrada de los verdes en el gobierno) se ha multiplicado por cuatro el número de puestos de trabajo de los trabajadores en el sector de las energías renovables sobre el número de trabajadores del sector nuclear en Alemania. Apostar por renovables significa reducir la dependencia energética de España, significa reducir el impacto sobre el cambio climático, significa apoyar un sector en alza en nuestro país generador de empleo en los tiempos de crisis que corren. Apoyar el cierre de nucleares significa minimizar el problema de los residuos. Algo que podríamos sufrir muy de cerca con la posible instalación de un almacén de residuos nucleares de alta actividad próxima a nuestra localidad.
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